#ElPerúQueQueremos

LAS MUJERES ¿NO TIENEN SENTIDO DE LA HISTORIA?

Publicado: 2014-11-30


Una mirada descuidada sobre el papel de la mujer en la literatura, nos había llevado a situarla básicamente en la poesía: un mundo que se habría formado en los apuntes íntimos de sus Diarios y en el que los sentimientos, la magia y la fantasía se rebelan contra toda razón y moldean su carácter. Sor Juana Inés de la Cruz (Verde embeleso de la vida humana/ loca esperanza, frenesí dorado), Alfonsina Storni (Oh mar, enorme mar, corazón fiero), Alejandra Pizarnik (y el tiempo estranguló mi estrella). 

Gabriel García Márquez, al tratar de explicar porqué la mujer no había destacado en la producción de novelas comentó que eso se debía a que las mujeres no tienen sentido de la historia.

Nada más desatinado.

Toda la humanidad que se ha levantado sobre el mundo natural es una historia compartida entre hombres y mujeres. La historia no soporta el vacío de género: cuando las sectas religiosas prohibieron representar en pinturas y esculturas el cuerpo desnudo de la mujer, el artista, islámico o cristiano, las sublimó en líneas curvas, elipses y espirales, en figuras policéntricas, es decir, las sublimó en el arabesco y en el barroco ("barru" en portugués significa "perla de forma diferente o irregular").

La novela “Todos los hombres son mortales”, de Simone de Beauvoir, no tiene nada que envidiar, en contenido y forma, a las mejores novelas escritas por hombres.

“El corazón helado”, novela de Almudena Grandes, es monumental: allí está el mundo dividido en el que habita todo español como consecuencia de la dictadura de Francisco Franco.

Acabo de leer “La mujer de papel”, novela escrita por la libanesa Rabih Alameddine. Espléndida.

Estas tres novelas me han impresionado con una fuerza similar a la que sentí cuando leía a Sartre (Los caminos de la libertad), a Coetze (Esperando a los bárbaros), o a García Márquez.

Acostumbrémonos, entonces, a novelas narradas por mujeres, que nos debelan, magistralmente, los juegos del poder, la pasión salvadora del arte, el fuego de la historia. Y a las mujeres en la historia.


Escrito por


Publicado en